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MODELOS DE DIÁLOGO INTERCONFESIONAL
MODELOS DE DIÁLOGO:
a) Respecto al modelo de sustitución. (Cualquier postulado que mantenga una superioridad sobre el otro crea un precedente negativo. Respecto a otras confesiones si mantenemos que nuestra ideología supera otra, le restamos vida a esa creencia que equivocada o no, forma parte de la intimidad de sus adeptos) La supremacía de Cristo (incluso por encima del Jesús histórico) lo impregna todo y lo lleva a un nivel máximo de autoridad pero esto aún sin negarlo, puede ser un obstáculo para el diálogo. Jesús en su humildad no creo que manifestase un intenso deseo por su persona sino por su reinado y por su Dios, siendo muy humilde en su trato con la humanidad. (Vide Juan 9)
b) Respecto al modelo de cumplimiento. (es un paso más cercano a mi idea multicultural religiosa. Dios está en todos, o puede estarlo. Abre más ventanas y cierra menos puertas. Queda una laguna en cuanto al politeísmo y a movimientos zorotraístas y panteístas. En Asia quedaría limitado, pero mejora al de sustitución)
c) Respecto al modelo de reciprocidad. (Encontramos un problema sobre el grado de posibilidad de influencia y aceptación de la alteridad. Es decir, ¿todo lo que recibo de otras denominaciones debería recibirlo? ¿En qué forma y manera? ¿Ofendería al otro mi forma de creer? Es decir, un diálogo en el que recíprocamente acepte verdades contrapuestas no es muy coherente si transcendiera de lo docente o meramente intelectual. Es positivo pero incompleto)
d) Respecto al modelo de aceptación. (sigue la linea anterior porque es un complemento al anterior, si bien sería el más cercano para un diálogo más positivo siempre y cuando no se traspasen los límites de la fe individual. Sentirse aceptado es una necesidad universal, aumenta y permite el crecimiento.
En mi opinión, el modelo de cumplimiento y el de aceptación serían los más adecuados en mi diálogo inter-religioso. Finalmente, entiendo que pertenecemos a una raza caída donde el problema en la comunicación y la recepción de mensajes salvíficos ha podido sufrir alteraciones, y abogo por una necesidad y casi obligación de respetarnos entre todos. Hago mías las palabras del gran Hans Kung: "No habrá paz entre las naciones si no hay paz entre las religiones"
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