TRABAJO SOBRE CINCO SALMOS




indice


Introducción general………………………………………………. 2


s a l m o 4………………………………………………………………...…………11

introducción
ANÁLISIS gramatical
PRÁFRASIS LITERAL
elementos que destacan y estructura
ANÁLISIS PERSONAL


S A L M O 11….............................................................................................................................19

INTRODUCCIÓN
ANÁLISIS GRAMATICAL
PARÁFRASIS LITERAL
ELEENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA
ANÁLISIS PERSONAL


S A L M O 1……………………………………………………………...……………24

INTRODUCCIÓN
ANÁLISIS GRAMATICAL
PARÁFRASIS LIETRAL
ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA
ANÁLISIS PERSONAL




S A L M O 13…………………………………………………………….…………….31

INTRODUCCIÓN
ANÁLISIS GRAMATICAL
PARÁFRASIS LITERAL
ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA
ANÁLISIS PERSONAL


S A L M O 23…………………………………………………………………………36

INTRODUCCIÓN
ANÁLISIS GRAMATICAL
PARÁFRASIS LITERAL
ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA
ANÁLISIS PERSONAL


C O N C L U S I O N E S     F I N AL E S………………………………………44


B I B L I O G R A F I A………………………………………………………….45




FACULTAD ADVENTISTA DE SAGUNTO


SALMOS
ELECCIÓN DE CINCO SALMOS Y BREVE EXPOSICIÓN TEXTUAL Y TEMÁTICA



DIEGO CALVO
4º TEOLOGÍA
Diciembre 2013



INTRODUCCIÓN GENERAL

      Sería difícil exagerar, tanto para el judío como para el gentil, la significación del libro de los Salmos. En él se reflejan los ideales de la piedad religiosa y la comunión con Dios, del dolor por el pecado y la búsqueda de la perfección, del caminar en la oscuridad sin temor, guiados por la lámpara de la fe; de la obediencia a la ley de Dios, de la delicia de adorar a Dios, de la comunión con los amigos de Dios, de la reverencia por la Palabra de Dios; de la humildad bajo la vara de la corrección, del saber confiar cuando triunfa la maldad y prospera la iniquidad, de mantener la serenidad cuando arrecia la tormenta.[1]
La literatura sapiencial no es exclusiva de Israel, sino que constituye un fenómeno ampliamente difundido en todo el Antiguo Oriente. La misma Biblia menciona a "los sabios de las naciones" (Jer. 10. 7) y alude en particular a la sabiduría de Asiria (Is. 10. 13), de Babilonia (Is. 47. 10; Jer. 50. 35) y de Fenicia (Ez. 28. 3-5). Especialmente célebres eran los sabios de Arabia y de Edóm, y Job lo mismo que sus tres amigos son presentados como habitantes de aquellas regiones (Jb. 1. 1; 2. 11). No menos renombrada era la sabiduría de Egipto, de donde procede un conjunto notable de escritos sapienciales, cuyos orígenes se remontan al 2800 a. C.
El rasgo más característico de la "sabiduría" oriental es su carácter eminentemente práctico. El sabio observa y escucha, está atento a la compleja trama de la vida y a las reacciones de los hombres. Él sabe que en la infinita variedad de los acontecimientos es posible descubrir un "orden" que es preciso conocer para actuar con éxito en la vida. La sabiduría es el arte de gobernarse a sí mismo, la capacidad de distinguir lo útil y ventajoso de lo nocivo y perjudicial. Las fuentes de ese conocimiento práctico son la inteligencia, la experiencia y la reflexión.
De este fondo cultural común a muchos pueblos del Antiguo Oriente se benefició también Israel. El movimiento sapiencial tomó un gran impulso en tiempos de Salomón, cuando el afianzamiento de la institución monárquica exigía la adecuada formación de las clases dirigentes del reino y la organización del personal administrativo. De allí que la tradición bíblica considere a aquel célebre rey como el prototipo del "sabio" (1 Rey. 5. 10) y le atribuya prácticamente todos los escritos sapienciales del Antiguo Testamento.
Pero Israel no recibió pasivamente aquella herencia cultural, sino que le imprimió su sello propio. La sabiduría que brota de la experiencia se convirtió gradualmente en una sabiduría religiosa, fundada en el "temor del Señor" y orientada hacia él. Así, el "humanismo" de la sabiduría oriental adquirió un contenido nuevo, que se acentúa sobre todo en los escritos más recientes, como son el prólogo al libro de los Proverbios, el Eclesiástico y la Sabiduría. Al destacar el origen divino de la Sabiduría, los "sabios" de Israel descubrieron nuevos horizontes, que los llevaron a poner de relieve la misteriosa trascendencia de esa Sabiduría y la incapacidad del hombre para penetrar en ella (Jb. 28).
Más aún, varios poemas contenidos en estos Libros "personifican" a la Sabiduría divina, presentándola como alguien que toma la palabra para exponer sus prerrogativas y su inagotable riqueza (Prov. 8. 22-31). Ella se identifica a sí misma con la Palabra creadora de Dios (Ecli. 24. 3) y con la Ley revelada a Israel (Ecli. 24. 23; Bar. 3. 9 – 4. 4). Esta personificación poética de la Sabiduría preparaba la revelación del misterio de Cristo, Palabra de Dios hecha carne (Jn. 1. 14) y Sabiduría de Dios manifestada plenamente a los hombres (1 Cor. 1. 24).
¿De dónde vienen los Salmos? ¿Qué es un salmo?[2]
Es un formado de himnos, cantos o poemas. Son composiciones poéticas. Están escritos en una forma que no es la nuestra, y eso depende de la cultura. Es importante conocer que los Salmos en particular “es el reflejo de algo” de un mundo, una fe y los Salmos expresan una fe y al mismo tiempo dan testimonio de algo, y cuentan lo que ellos han vivido con Dios: muchos expresan su testimonio, fe alabanza pero el elemento importante es una “acción de Dios en el pasado”. Es decir que los Salmos cuentan la acción de Dios.
Lo que encontramos de los documentos más antiguos son poemas, definiciones, cantos. Los salmos son relatos que cuentan historias, y en la Biblia tenemos algunos que son muy antiguos. Algunos libros poéticos que no son considerados como sapienciales o poéticos son considerados como sapienciales ej. Jeremías, hay partes en Daniel que son poesías, también en Génesis. Esto quiere decir que la poesía es antigua y hasta hoy también lo hacemos expresamos la belleza de las cosas.
En nuestra época ya no hablamos en verso o poéticamente, porque vivimos en una cultura que dista mucho del tiempo pero es importante acercarnos a la literatura antigua.
Los Salmos también describen un mundo que no conocemos ej. “las vacas de Basham” o “el desierto de Judá” pero sin sentimientos. También describe gestos, ritos. También nos dan un vocabulario propio y específico que expresa cosas particulares que trataremos de identificarlos.
¿Cuál es el orden o temática de los grupos de los salmos? No es fácil de responder pero los finales de los libros nos ayudan a entender generalmente una invitación a la adoración ej. Sal 72.  Ex. “amén y amen” allí se acaba un bloque. Sal 89: “amén y amén”. ¿Porque han sido agrupados? (aunque los números vinieron después).  Hay Varios criterios:
      Grupos de Salmos:
GRUPO I: Salmos del 1- 40, 41 (nuestros salmos analizados)
GRUPO II: Salmos del 42- 72
GRUPO III: Salmos del 73- 89
GRUPO IV: Salmos del 90 – 106
GRUPO V: Salmos del 107-150
Los salmos son una fuente de información formidable: ¿por qué?
1. porque describe la manera como ellos  descubre o entienden a Dios.
2. constituye la identidad de la fe del pueblo de Israel y sirve para invitar a la gente para adorar (paso mar rojo)
3. Que la revelación con Dios es una revelación de adoración, porque nos orienta hacia Dios porque él es el único y el que salva, perdona y Creador y nos ha libreado y ha hecho de nosotros un pueblo. Noción de fe importante es la revelación de “Dios Creador”, Israel así lo reconoce y es parte de su esencia y su relación que tiene con él lo ve como Dios Creador.  Por ello la creación para Israel no solo significa que Dios sea Creador de cielos  y tierra sino que sus actos son de creación (ej. cambiarnos, salvarnos)
Después del exilio el templo desapareció y fue catastrófico ya que el templo representaba simbólicamente en la presencia de Dios sino que era un hecho visible de religiosidad y cuando no lo había buscaron la manera de representar un nexo con Dios.
Cuando templo de Salomón desapareció y con el tiempo buscaron la manera de ¿Cómo buscar a Dios? Durante el exilio han encontrado una liturgia para alabar a Dios. Como no tienen templo lo más sagrado que tienen es “LA TORA”  (el rollo) desde allí el rollo físico se convierte en un nuevo templo. Y hasta ahora está el rollo en un espacio (la sinagoga). Se acercan a una liturgia y el estudio del “rollo” es lo más importante. Y de todo el AT “la Tora” es lo más importante. Los salmos se convierten en algo accesible y común para expresar la fe de Israel.
Por lo tanto, tenemos “el rollo” y “los cantos”. Después del exilio todo cambió ej. La autoridad moral ya no es el “rey” ej. Herodes (quien sabe que su poder funcionar porque los romanos apoyan) pero los Sacerdotes si mantiene su poder.
Los salmos se reconstruyen en tiempos de Herodes, pero no es exactamente como los del periodo de Salomón. Entonces vamos a tener los “salmos” (oraciones cantadas) y lo que los cristianos  han seguido.
¿Cómo organizar los salmos?
No hay un solo nombre para organizarlos
1. “Salmo” (gr.) y de una familia de palabra que tiene relación con cuerda y con la idea de pellizcar las cuerdas. Ej. El salterio nos acercaría a la idea de algo para hacer música y las cuerdas.
2. “mismorim” (heb) y esta raíz no viene como de las cuerdas sino como una alabanza, música que sirve como para expresar su fe ej. En la Biblia aparece “mismor de David”.
Naturalmente nosotros conocemos “tejilim” la traducción judía lo ha utilizado en algún momento para llamarlos. Por eso en la Biblia
3. “tehilim”  “tanaj” (Biblia Hebraica o AT) es una abr. que quiere decir “torah,  nebiim y quetubim”. A partir de allí se los llama “tehilim”.
Estos tres tipos nos muestran que hay tres momentos. Nosotros le llamamos “salmos” porque nos hemos inspirado en la traducción de la Septuaginta.
No se han encontrado todos sino un poco menos de la mitad y en pedazos.
Primero: La versión de los salmos encontrados en la gruta 11 = se han encontrado varios, a partir del 41 al 80 y otros pedacitos en otras grutas. El texto tiene deficiencias ortográficas en comparación del Lening Grado o Codex de Alepo (s. XI) nos hemos dado cuenta que los salmos están muy bien conservados. Es una parte de la Biblia donde hay una transmisión bastante fiel del texto bíblico en la versión hebrea.
Segundo: Tenían mucha importancia, en ese entonces la comunidad hebrea la utilizaba mucho, por ellos han hecho muchas copias.
Tercero: En ese momento de Qumram, ellos no lo conocen en el mismo orden que nosotros: no tenía caps. Y versículos y los salmos no están en el mismo orden que el nuestro. Para ellos de esa forma es muy coherente.
¿Qué nos enseñan los Salmos? La pregunta es buena, porque como todas las Escrituras, el himnario de Israel es útil para enseñar, redargüir, corregir e instruir en justicia (2 Timoteo 3:16). Sin embargo, no fue escrito primordialmente para orientarnos, sino para adorar al Señor y clamar a él.
El título del libro en hebreo es “tehillim” que significa alabanzas, es muy adecuado, ya que casi todos los salmos alaban a Dios. ¿Qué es la alabanza? Es contar las virtudes de alguien, decir lo bueno que es y que ha hecho. Algunos de los salmos reconocen a Jehová por su poder y bondad, son oraciones. Otros se dirigen a la congregación como testimonio.
El segundo contenido principal es el clamor. Desde su más profunda angustia, los salmistas invocan a Dios, no ocultan su zozobra, pero confían en aquél que siempre ha sido fiel y por lo tanto, los librará nuevamente de la angustia.[3]




salmo 4

SUPLICA INDIVIDUAL. ORACION DE CONFIANZA


1.     INTRODUCCIÓN:
Cuando San Agustín, después de su conversión, desgrana sus recuerdos en las Confesiones, se siente hondamente impresionado por este salmo escribiendo estas palabras: «Me ericé de temor en aquel trance y me encendí de esperanza y júbilo en tu misericordia, oh Padre. Y estos efectos salían de mis ojos y por mi voz cuando, vuelto a nosotros tu espíritu de bondad, nos dice: «Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo seréis de pesado corazón? ¿Por qué amáis la vanidad y buscáis la mentira?». Yo había amado la vanidad y buscado la mentira y por eso oí y temí, porque tales cosas se dicen para aquellos que son tales cuales yo recordaba haber sido». Las palabras del salmo habían provocado en él sentimientos de honda preocupación y de hondo agradecimiento, sentimientos que, a lo largo de la historia, han ido brotando en quienes han rezado esta oración. Según un autor, el Sal 4 formaría un díptico perfecto con el Sal 3: si éste es una oración confiada presentada al Señor al comienzo del día, el Sal 4 es una plegaria cargada de serenidad y confianza en Dios, porque ha hecho maravillas en la vida del orante, recitada al final del día. Su interpretación nos resultará más fácil acudiendo no a los géneros literarios, pues «el salmo no se deja espontáneamente clasificar en ninguno de los géneros o categorías puras» (A. González), sino al clima general de esta oración. Su autor no aparece claramente identificado, pese a la indicación del título que lo atribuye a David. Tampoco conocemos las circunstancias externas que rodean al orante. Pero sí está clara y manifiesta la situación de paz, serenidad, tranquilidad, sosiego, libertad que respira porque Dios es quien le da todo eso. Por ello el orante «es un testigo privilegiado del amor de Dios y su mensaje de confianza pasa intacto incluso a través del frío y la oscuridad de la noche» (G. Ravasi). En última instancia el salmo nos habla de un hombre nuevo que ha sufrido sin amargura, sin resentimiento, sin ansias de venganza. La prueba ha sido para él una ocasión de fortalecimiento de su fe en el Dios misericordioso y bondadoso que es su “defensor”
2.      ANÁLISIS GRAMATICAL:[7]
3. 4 1 לַמְנַצֵּ֥חַ בִּנְגִינ֗וֹת מִזְמ֥וֹר לְדָוִֽד׃
2 בְּקָרְאִ֡י עֲנֵ֤נִי׀ אֱלֹ֘הֵ֤י צִדְקִ֗י בַּ֭צָּר הִרְחַ֣בְתָּ לִּ֑י חָ֝נֵּ֗נִי וּשְׁמַ֥ע תְּפִלָּתִֽי׃
4. 3     בְּנֵ֥י אִ֡ישׁ עַד־מֶ֬ה כְבוֹדִ֣י לִ֭כְלִמָּה תֶּאֱהָב֣וּן רִ֑יק תְּבַקְשׁ֖וּ כָזָ֣ב סֶֽלָה׃
5. 4     וּדְע֗וּ כִּֽי־הִפְלָ֣ה יְ֭הוָה חָסִ֣יד ל֑וֹ יְהוָ֥ה יִ֝שְׁמַ֗ע בְּקָרְאִ֥י אֵלָֽיו׃
6. 5     רִגְז֗וּ וְֽאַל־תֶּ֫חֱטָ֥אוּ אִמְר֣וּ בִ֭לְבַבְכֶם עַֽל־מִשְׁכַּבְכֶ֗ם וְדֹ֣מּוּ סֶֽלָה׃
7. 6     זִבְח֥וּ זִבְחֵי־צֶ֑דֶק וּ֝בִטְח֗וּ אֶל־יְהוָֽה׃
8. 7     רַבִּ֥ים אֹמְרִים֮ מִֽי־יַרְאֵ֪נוּ֫ ט֥וֹב נְֽסָה־עָ֭לֵינוּ א֨וֹר פָּנֶ֬יךָ יְהוָֽה׃
9. 8     נָתַ֣תָּה שִׂמְחָ֣ה בְלִבִּ֑י מֵעֵ֬ת דְּגָנָ֖ם וְתִֽירוֹשָׁ֣ם רָֽבּוּ׃
10.                   9    בְּשָׁל֣וֹם יַחְדָּו֮ אֶשְׁכְּבָ֪ה וְאִ֫ישָׁ֥ן כִּֽי־אַתָּ֣ה יְהוָ֣ה לְבָדָ֑ד לָ֝בֶ֗טַח תּוֹשִׁיבֵֽנִי׃
Al Músico principal: sobre Neginoth: Salmo de David.[8]
1 Respóndeme cuando clamo, oh Dios de mi justicia: Estando en angustia, tú me hiciste ensanchar: Ten misericordia de mí, y oye mi oración. 2 Hijos de los hombres, ¿hasta cuándo volveréis mi honra en infamia, Amaréis la vanidad, y buscaréis la mentira? (Selah.) 3 Sabed pues, que Jehová hizo apartar al pío para sí: Jehová oirá cuando yo a él clamare. 4 Temblad, y no pequéis: Conversad en vuestro corazón sobre vuestra cama, y desistid. (Selah.) 5 Ofreced sacrificios de justicia, Y confiad en Jehová. 6 Muchos dicen: ¿Quién nos mostrará el bien? Alza sobre nosotros, oh Jehová, la luz de tu rostro. 7 Tú diste alegría en mi corazón, Más que tienen ellos en el tiempo que se multiplicó su grano y su mosto. 8 En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque solo tú, Jehová, me harás estar confiado.


2.1     PARÁFRASIS LITERAL:[9]
Para/por el que brilla (participio) el que es brillante en la dirección de un poema con música, cantado, (piel), con instrumento de cuerda. Poema musical de/para/por David. (Anotamos el significado del término Selah, para aclararlo, ya que aparece varias veces en los salmos) [10]
(1)   En mi gritar (Constructo infinitivo sufijado) prestadme atención, oídme dioses (plural de intensidad, no numérico) justos míos (de mi justicia) en el lugar estrecho y apretado (angustia), ahora doblad en bondad hacia mí, hiciste (hifil sufijado) tú ensancharme y escucha mi súplica (sufijado sustantivo)
(2)   Hijos del ser existente, del hombre, ¿Hasta qué (conjunción adverbial) “momento” mi esplendor “cambia” a desgracia, Amaréis (imperfecto plural) lo vacío, lo que no vale nada y buscaréis (imperfecto piel) la burla, la mentira?
(3)   Y sabed, conoced (imperativo) ha distinguido, escogido (hifil sufijado) Jehová al amable, piadoso, para sí mismo Jehová, oirá (imperfecto) en mi gritar hacia Él
(4)   Temblad y no (adverbio negativo) hacer pecado, pequéis (Yusivo), Anunciad, hablad en el corazón vuestro y hacia nuestra cama (el lugar donde duermes) y callad
(5)   Sacrificad sacrificios (constructo) justos, (hechos de justicia) y estad seguros sobre Jehová
(6)   Son muchos, abundantes, los que hablan (participio) ¿Quién nos hará ver (hifil) lo bueno? Alza, eleva sobre nuestros ojos tu cara, tu presencia, Jehová
(7)   Tú diste (sufijado perfecto) alegría a mi corazón más que desde el tiempo del grano, uva, pan, trigo (cosecha) y su jugo de uva fresco, cuando ésta cosecha aumenta
(8)   En unidad de paz me acostaré (cohortativo) y dormiré (imperfecto) porque tú Jehová, a/para ti solamente tú, me haces vivir (hifil) a/para seguridad, confianza completa
2.2 ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA:[11]
Cómo vivir seguro 4:8

I.    Líbrame del deseo de ser alabado.
La alabanza de los hombres es pura falsedad.
II.  Líbrame del deseo de ser preferido a otros.
“La cruz penetrará en la carne de nuestras vidas donde nos duele, sin tener en consideración nuestra cuidada reputación.”[12]
III. Líbrame del temor de ser censurado.
El temor a la crítica es una de las cosas más difíciles de afrontar.
IV. Líbrame del temor de ser olvidado.
Cada persona anhela dejar algo por lo cual puede ser recordada.[13]

Primeramente, observamos que abundan sobre todo los imperativos (respóndeme, oye, sabedlo, temblad y dejad, reflexionad, guardad, ofreced, confiad…)
Observamos los cambios en los tiempos verbales, desde el perfecto al imperfecto, desde piel al hifil.
Hay un diálogo hacia Dios (vers. 2) al que vuelve (vers 8 y 9) y otro hacia los Señores que están extraviados. (Vers 3 y 4) como mensajes de advertencia y enfáticos al mismo tiempo, uniendo amor y confianza por un lado y de reprensión por otro.
Destacan en especial los verbos. (Utiliza qal, piel, hifil) según el tono de su súplica.  La construcción elíptica del versículo 3, los enfáticos de consecuencia del vers 4.
Parece mostrar la lamentación de un hombre injustamente acusado. Es una oración de confianza. ¿Qué palabras se repiten? Más que vocablos, lo que “suena” en el poema son preguntas y respuestas. Es una tensión dramática entre los personajes del poema y la tensión emotiva.
No hay diálogo de personajes porque habla uno solo, aunque éste interpela a otros. Los desenlaces son dramáticos. La resolución de todos está en la confianza.
Es un diálogo implícito. ¿Qué estructura podemos encontrar?
a)      Por un lado, una introducción en forma de plegaria al Señor. (v2)
b)      Discurso a los nobles (pregunta retórica y 7 imperativos) (v4-6)
c)      Actitud del grupo y testimonio del que ora hablando a Dios. (v7-9)
      Hay un espacio y una ilusión como paralelismo antinómico. “Tú que en la angustia me diste holgura” (angustia frente a paz). Veamos algunas notas.
La expresión Del maestro de coro aparece 57 veces en los Salmos. Se refiere, probablemente, al levita encargado de dirigir los cantos en el templo. Cf. 1 Cr 15.21.
Dios y defensor mío: lit. Dios de mi justicia. Cf. Sal 35.23–24.
Grandes señores: lit. Hijos de hombre. La exhortación parece estar dirigida a las personas que ocupan un puesto destacado en la sociedad y que se aprovechan de su poder en perjuicio de los más débiles.
Tiemblen y no pequen más. En Ef. 4.26 se citan estas palabras de acuerdo con la versión griega (LXX).
La alegría que reinaba cuando había una cosecha abundante era proverbial en Israel. Cf. Sal 126.6; Is 9.3 (2); 16.10; Jer 48.33.
A causa de este v., estar confiado. El salmo suele utilizarse como oración de la noche. Véase 3.5 (6) n. Cf. Pr 3.24.
Tiene una introducción en estilo de lamentación (v. 2) en la que aparece el orante que ‘grita’, que ‘invoca’ esperando la respuesta oracular de Dios, su defensor, en la que le llega la salvación, la liberación, la esperanza,
En las dos estrofas siguientes (vv. 3-7), de carácter parenético[14], encontramos expresado el mensaje central del salmo que no es otro que «una vigorosa llamada a optar por Dios, abandonándose con confianza en su proyecto y en su amor, venciendo toda tentación de duda o vacilación» (G. Ravasi). Con su tono de color más o menos sapiencial propone este mensaje a los impíos, a los que buscan apoyos inconsistentes, pero también a los creyentes que dudan, que vacilan. El ejemplo de su vida es el mejor argumento para creer y comprender que no son ni el hombre y sus maniobras ni los ídolos los que salvan, sino sólo el Señor vivo y operante en la historia;
 El final (vv. 8-9) tiene el carácter de himno majestuoso en el que el salmista recoge dos sentimientos autobiográficos: la alegría y la paz de una vida apoyada en las manos de Dios son superiores a todos los bienes materiales. Desde este convencimiento el salmista puede entregarse tranquilamente al sueño que es para él signo de paz, de revelación divina, de éxtasis, de visión beatífica. Desde este convencimiento podemos entender esta oración vespertina que el israelita piadoso repetía en la sinagoga: «Es un don de tu voluntad, oh Señor, que yo pueda acostarme en paz y despertarme en el mismo estado. Haz que mi reposo no sea turbado por imágenes terroríficas o por visiones impuras. Haz que mi reposo sea el de la inocencia y, transcurrido el tiempo del sueño, devuelve la luz a mis ojos, sin hacerme dormir en el sueño de la muerte, porque eres tú quien das luz a la pupila de mis ojos. ¡Bendito seas tú, oh Eterno, que iluminas el mundo con tu gloria!».
3.     ANÁLISIS PERSONAL:
El salmo y sus símbolos «pueden ser fácilmente transpuestos al contexto cristiano, llenándose así con el nuevo significado de la experiencia religiosa cristiana» (Ef. 4.26) cita la primera frase del v.5 como ejemplo. Algunas pistas nos pueden ayudar a hacer esta transposición:
A) En primer lugar, nos puede ayudar el uso que la liturgia hace del salmo expresando siempre un mensaje de paz, serenidad, confianza. En este sentido aparece usado por la Liturgia de las Horas como oración de completas, al término del día: las maravillas que Dios ha realizado durante la jornada nos permiten enfrentarnos con tranquilidad a la noche, porque Él sigue velando por nosotros. Es también usado en el Oficio de Lecturas del Sábado Santo como expresión de la confianza absoluta de Jesús en las manos del Padre. Por eso San Agustín nos recordará que «el Señor hizo maravillas al resucitar a Jesús de entre los muertos».
B) En un mundo en el que el honor, la gloria y el nombre de Dios son con frecuencia pisoteados y ultrajados, el salmo nos urge a dos tareas: por una parte, nuestra vida debe ser una alabanza y adoración permanente de ese honor ultrajado (v. 3), pero, por otra, debe ser también manifestación, testimonio de la actuación y presencia de Dios entre los hombres. Como el salmista, debiéramos poder presentar una vida en la que fuera patente la presencia y actuación de Dios: una vida coherente que fuera libro abierto en el que es posible leer los ‘milagros’ que el Señor hace en favor nuestro (v. 4).
C) Pero el salmo nos recuerda también algo importante: que no podemos confundir las ‘consolaciones’ con «el Dios de todo consuelo» (2Cor 1 ,3); que no son los bienes que nos da, la razón para amar a Dios ni necesitamos ver sus favores para confiar en Él. Descubrir y vivir a Dios como «el bien, todo bien, sumo bien» (Francisco de Asís) es la meta que supera todo consuelo y que supone haber llegado a la confesión gozosa del pobre de Asís: «Dios es». En ella encuentra el creyente la alegría y la paz que sobrepasan toda experiencia humana. Y puede entonces exclamar: «No me mueve, mi Dios, para quererte, el cielo que me tienes prometido/... Tú me mueves, Señor...».[15]
“El pecado ha sido, y es y será siempre el padre de la miseria.”
Carlyle
“Solemos juzgarnos por lo que nos sentimos capaces de hacer; pero la gente nos juzga por lo que hemos hecho.”
Longfellow



SALMO 11
El refugio del justo
1.     INTRODUCCIÓN
En su libro A Bunch of Everlastings (Un manojo de cosas eternas), Frank W. Borehan escribe acerca de Guillermo Carey, el zapatero que llegó a ser un famoso misionero en la India: “Allí está él… ¡la Biblia abierta delante de él, y un mapamundi hecho a mano colgando de la pared! En la Biblia vio al Rey en su hermosura; sobre el mapa vio vislumbres de los lejanos horizontes. Para él, ambas cosas eran inseparables. Y movido por la visión del Señor que vio en la primera, y por la visión de los ilimitados horizontes que vio en la segunda, ‘abandonó su taller e hizo historia.”
Los fundamentos, sean personas o principios, siempre son importantes. El diablo trata de destruirlos; si puede destruir la confianza en las Escrituras o la dependencia de Dios, o si puede cegar a los creyentes a las realidades espirituales, logra debilitar la iglesia y anular su impacto en la sociedad.[16]

2       ANÁLISIS GRAMATICAL[17]
111 לַמְנַצֵּחַ לְדָוִד בַּיהוָה חָסִיתִי אֵיךְ תֹּאמְרוּ לְנַפְשִׁי נוּדִי  הַרְכֶם צִפּוֹר׃
2 כִּי הִנֵּה הָרְשָׁעִים יִדְרְכוּן קֶשֶׁת כּוֹנְנוּ חִצָּם עַל־יֶתֶר לִירוֹת בְּמוֹ־אֹפֶל לְיִשְׁרֵי־לֵב׃
3 כִּי הַשָּׁתוֹת יֵהָרֵסוּן צַדִּיק מַה־פָּעָל׃
4 יְהוָה בְּהֵיכַל קָדְשׁוֹ יְהוָה בַּשָּׁמַיִם כִּסְאוֹ עֵינָיו יֶחֱזוּ עַפְעַפָּיו יִבְחֲנוּ בְּנֵי אָדָם׃
5 יְהוָה צַדִּיק יִבְחָן וְרָשָׁע וְאֹהֵב חָמָס שָׂנְאָה נַפְשׁוֹ׃
6 יַמְטֵר עַל־רְשָׁעִים פַּחִים אֵשׁ וְגָפְרִית וְרוּחַ זִלְעָפוֹת מְנָת כּוֹסָם׃
7 כִּי־צַדִּיק יְהוָה צְדָקוֹת אָהֵב יָשָׁר יֶחֱזוּ פָנֵימוֹ׃

Al Músico principal: Salmo de David.
1 En Jehová he confiado; ¿Cómo decís a mi alma: Escapa al monte cual ave? 2 Porque he aquí, los malos flecharon el arco, Apercibieron sus saetas sobre la cuerda, Para asaetear en oculto a los rectos de corazón. 3 Si fueren destruidos los fundamentos, ¿Qué ha de hacer el justo? 4 Jehová en el templo de su santidad: La silla de Jehová está en el cielo: Sus ojos ven, sus párpados examinan a los hijos de los hombres. 5 Jehová prueba al justo; Empero al malo y al que ama la violencia, su alma aborrece. 6 Sobre los malos lloverá lazos; Fuego y azufre, con vientos de torbellinos, será la porción del cáliz de ellos. 7 Porque el justo Jehová ama la justicia: Al recto mirará su rostro. [18]





2.1         PARÁFRASIS LITERAL:
(1)   A/para el que es brillante (Participio piel)  a/para David en Jehová he confiado (perfecto); ¿Cómo (adverbial interrogativo) diréis (imperfecto plural) a/para mi alma, escapaos (imperativo plural) a vuestras montañas como pájaros saltando

(2)   Porque he aquí, los equivocados (con artículo) tensarán (imperfecto plural) el arco, enderezaron (piel perfecto) sus flechas hacia la cuerda para colocar (infinitivo constructo) en tinieblas a los rectos de corazón,

(3)    porque la bebida (la fuente de donde brota algo) serán destruidos (nifal imperfecto) qué entonces el justo

(4)   Jehová en su santo palacio, en su plenitud (trono) sus ojos percibirán (imperfecto) y sus pestañas investigarán a los hijos de la humanidad

(5)   Jehová probará al justo y al equivocado y al que ama (participio sustantivo verbo) el ser violento, su alma los aborreció (perfecto)

(6)   Hacia los equivocados hará llover (hifil imperfecto) temores, fuego, azufre y viento que quema, reparto de su medida de lote.

(7)   Porque Jehová es justo, amó (perfecto) la rectitud, el recto mirará fijamente (imperfecto) su cara.
2.2    ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA:
Este Salmo es un canto de confianza. El Salmo tiene dos estrofas: 1) El salmista rechaza a los que le dicen que se aparte del Señor y de su templo (vers. 1–3); 2) La seguridad del salmista de que el justo y santo juez destruirá al malvado y protegerá al justo (vers. 4–7). En los vers. 2, 3 describe la amenaza que el malvado presenta para un gobierno justo; en los vers. 4–5 el justo dominio celestial es afirmado; y en los vers. 5–6 el salmista describe la justicia de Dios alcanzada en los asuntos humanos.
El Salmo es rico en su construcción literaria. Nótense algunas figuras y contrastes repetidos: 1) la idea de refugio o asilo, al monte, en su templo, en Jehovah; 2) Dios aborrece al impío pero ama la justicia; 3) los malos se esconden, en oculto, pero Dios ve y examina y al final los rectos contemplarán su rostro.
¿Qué palabras se repiten? Observamos la importancia de las conjunciones que unen las oraciones, porque/que, dando respuestas a las preguntas que se hace el salmista. La primera pregunta indica un rechazo.
Vemos una metonimia en v.4 “los párpados”. El v.1 y 7 abren y cierra con Jehová. Vuelve a aparecer un paralelismo antitético entre justo y malvado, oscuridad y visión (v.4) El juicio aparece de un modo escatológico.
Dios actúa en el salmo como juez y hay un lenguaje imaginativo en el asilo y el refugio.
La estructura de este salmo muestra un interesante ejemplo de interrupción, figura de retórica en que se pasa rápidamente de una idea a otra, dejando inconcluso el sentido gramatical de las frases comenzadas. El tema central es la declaración de la confianza del salmista en el cuidado de Dios. Esta idea es interrumpida por las amenazas de los incrédulos (Sal. 11: 1-3). En hebreo, el lenguaje de este corto salmo, en que se usa mucho la asonancia, es vívido, pujante y directo. Los sonidos vocálicos predominantes en las terminaciones de los versículos varían de un versículo a otro
 Imagen de arco y flechas. (Salmo 11)
El refugio seguro 11:1–7

I.    El refugio (vv. 1, 2).
1.   Del arco: La oscuridad.
2.   De la flecha: La amenaza del mal.
3.   De la cuerda: La trampa traidora.

II.  El fundamento (vv. 3, 4).
1.   El Señor está en su trono.
2.   Sus ojos ven, vigilan.
3.   Examina los corazones.

III. La prueba (vv. 5–7).
1.   Aborrece al impío.
2.   Al impío le alcanza el mal.
      3.   .Los justos son protegidos.



3       ANÁLISIS PERSONAL
Se dice que María, reina de Escocia[19], recitó el Sal. 11 de rodillas sobre el cadalso mientras aguardaba el momento de su ejecución. En la hora de la prueba, este salmo también puede expresar nuestra confianza en Dios.
San Agustín piensa en los herejes donacianos y baraja de otro modo algunos datos del salmo:
«Tengo un monte en quien confío. ¿Por qué me decís que pase a vosotros, como si hubiera muchos mesías? Y si os llamáis monte» por vuestra soberbia, habrá que ser pájaro con las alas de las virtudes y los preceptos de DIOS. Ellos nos prohíben volar a tales montes o poner nuestra esperanza en hombres soberbios. Tengo una casa don- de descansar, pues 'el ave ha encontrado casa' (Sal 84, 4). Y Dios se ofrece como refugio del pobre. Para no perder al mesías buscándolo entre los herejes, digamos con toda confianza: Confío en el Señor, ¿por qué me decís que vuele a los montes como un ave?».[20]
El salmista no cae en la trampa del consejo equivocado porque confía en Dios, y esta confianza se basa en fundamentos firmes: el carácter y la naturaleza de Dios. En contraste con el v. 3, el v. 4 habla de firmeza; Dios está firme; el que está anclado en él tiene fundamentos sólidos. De modo que el salmista no huye de la batalla o de la prueba porque sabe que Dios mira todos los detalles, es justo y es poderoso para cuidarlo y para hacer justicia a los impíos.[21]
Quizá sea más agudo el salmo leído dentro de casa, aplicado a miembros de nuestra comunidad. Finalmente, de la conclusión del salmo saltamos a una bienaventuranza: «Dichosos los de corazón puro, porque ellos verán a Dios».
SALMO 1
El justo y los pecadores

1.    INTRODUCCIÓN

“No es haciendo aquello que nos agrada hacer, sino agradándonos de aquello que debemos hacer, lo que hace que la vida sea bendecida.”[22]


          La puesta de sol trae emociones profundas, la tempestad causa miedo, la criatura despierta ternura, el recuerdo de la persona amiga provoca nostalgia y el encuentro con el trabajador causa admiración. Cualquier situación de vida puede emocionar. Si la persona tuviere el don, transforma esto en poesía. Si tuviera fe, lo transforma todo en oración. Así nacieron los salmos, con una receta sencilla: una dosis de observación de la realidad, otra dosis de emoción y otra de fe, todo ello mezclado en un poema.
          Una persona angustiada, llorando en la cama, cierta noche, hizo una súplica vehemente a Dios; otra, contemplando una noche estrellada, compuso un himno de alabanza; alguien observó la tierra seca, sedienta de agua, y manifestó su ardiente deseo de divinidad; otro observó un guarda nocturno esperando ansiosamente a la aurora, y desbordó su esperanza en la gracia divina; otro más, al ver a una criatura, después de mamar, durmiendo agarrada al cuello de su madre, se sintió acogido en los brazos de Dios; al ver el óleo de la unción sacerdotal y el rocío de las montañas, una persona evocó las bendiciones sobre la familia; y al recordar los hechos de la historia, otra entonó más alabanzas. Los ejemplos se repiten en cada salmo. Nosotros mismos  podemos hacer la lectura, observando qué experiencia de vida originó el salmo.

          Eso sucede porque los salmos nacieron de lo profundo de la vida. Al igual que los demás libros de la Biblia, los salmos, en especial, no cayeron rápido del cielo, sino que más bien, brotaron de los sufrimientos y emociones de las personas. No eran, originalmente, oraciones o cánticos para el templo, ni para la sinagoga, sino más bien, para expresar la fe del pueblo judío, en su vida concreta

2.      ANÁLISIS GRAMATICAL[23]
11 אַשְׁרֵי־הָאִישׁ אֲשֶׁר לֹא הָלַךְ בַּעֲצַת רְשָׁעִים וּבְדֶרֶךְ חַטָּאִים לֹא עָמָד וּבְמוֹשַׁב לֵצִים לֹא יָשָׁב׃
2 כִּי אִם בְּתוֹרַת יְהוָה חֶפְצוֹ וּבְתוֹרָתוֹ יֶהְגֶּה יוֹמָם וָלָיְלָה׃
3 וְהָיָה כְּעֵץ שָׁתוּל עַל־פַּלְגֵי מָיִם אֲשֶׁר פִּרְיוֹ יִתֵּן בְּעִתּוֹ וְעָלֵהוּ לֹא־יִבּוֹל וְכֹל אֲשֶׁר־יַעֲשֶׂה יַצְלִיחַ׃
4 לֹא־כֵן הָרְשָׁעִים כִּי אִם־ךַּמֹּץ אֲשֶׁר־תִּדְּפֶנּוּ רוּחַ׃
5 עַל־כֵּן לֹא־יָקֻמוּ רְשָׁעִים בַּמִּשְׁפָּט וְחַטָּאִים בַּעֲדַת צַדִּיקִים׃
6 כִּי־יוֹדֵעַ יְהוָה דֶּרֶךְ צַדִּיקִים וְדֶרֶךְ רְשָׁעִים תֹּאבֵד׃

1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; 2 Antes en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. 3 Y será como el árbol plantado junto a arroyos de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará. 4 No así los malos: Sino como el tamo que arrebata el viento. 5 Por tanto no se levantarán los malos en el juicio, Ni los pecadores en la congregación de los justos. 6 Porque Jehová conoce el camino de los justos; Mas la senda de los malos perecerá. [24]


2.1       PARÁFRASIS LITERAL:
(1)    Es recto aquel hombre (con artículo), el cual, no caminó (perfecto qal) en consejos de impíos y (tampoco) equivocados, ni puestos delante de una silla de burladores (participio sustantivo) han permanecido
(2)   Ya que en el camino de enseñanza de Jehová se inclina su gusto y en su enseñanza meditará (imperfecto) día y noche
(3)    Será (perfecto conversivo) como árbol que es trasplantado (qal pasivo participio sustantivo)  en mares divididos, su fruto dará (imperfecto) en su tiempo y su hoja no caerá (imperfecto) y todo lo que hará (imperfecto) será empujado (hifil imperfecto)
(4)    No así los impíos que como el tamo que dispersará (imperfecto) un viento.
(5)    entonces, no se levantarán (imperfecto plural qal) en el juicio ni los equivocados en la comunidad de los justos
(6)    Porque es Jehová el que sabe (participio verbal puro) el camino de los justos y el camino de los impíos terminará (imperfecto)


2.2       ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA
Tres aspectos de la vida
1:1–6
I.    Andar en uno de dos caminos:
1.   El camino de los justos: prosperidad y felicidad.
2.   El camino de los malos: angustia y temor.
II.  Estar en dos situaciones:
1.   Arraigados: presentes, en la congregación de los justos.
2.   Desarraigados: ausentes, no se levantarán los impíos en el juicio, v. 5.
III. Sentarse en dos sillas:
1.   Con los escarnecedores: Son como el tamo que arrebata el viento, v. 4.
2.   Con los justos: En la ley de Jehovah está su delicia, v. 2.


        El salmo consta de dos partes: 1-3, el justo 4-5, el impío. El v. 6 construido como un quiasmo sirve de final al v. 5: Dios conoce el camino de los justos. Dios está vuelto hacia los justos. El camino de los malvados lleva a la perdición. Lo que vemos claramente destacado es el símil o la comparación. Como un árbol aquel a quién Jehová justifica o como algo perenne que se termina, el impío.
          Las dos partes del salmo se contraponen como un quiasmo: realidad-imagen (1-2 y 3) e imagen-realidad (4 y 5).
          El salmo se estructura en seis versículos simétricos, pues los tres primeros se ocupan de la figura del justo y las tres siguientes del pecador, por lo que se presentan dos momentos que son opuestos o antitéticos.
          El primer momento que corresponde a la figura del justo, refiere en el primer versículo a lo que el hombre no debe hacer; el segundo versículo presenta en forma antitética qué debe hacer el hombre justo; y el tercer versículo, en una síntesis, cuál es el primero que obtienen por cumplir con lo anterior.
          Esto sugiere que existe una separación total entre justos y pecadores, que supone una marginación y discriminación hacia aquellos que no siguen la ley. Este concepto pertenece al hombre del Antiguo Testamento, para quien quebrantar la ley supone la pérdida definitiva de la gracia divina. Este salmo es el inaugural del libro y propone la división entre “los justos” y “los pecadores”, presentando cuáles son las condiciones que se tienen que cumplir para ser un justo y gracias a ello ser escuchado por la divinidad. Es conocido con el título “El justo y los pecadores”; a través de ello presenta las dos únicas posibilidades que existen para los hombres, de ser considerados por Dios. El título configura una antítesis en cuanto a las características de los hombres y la cantidad; el singular atribuido al justo puede ser considerado una hipérbole o exageración, dando a entender lo difícil y sacrificado que es seguir la ley de Dios.
          Dichoso: está fórmula es típica del estilo sapiencial. Se describe de forma negativa la actitud del justo y de forma positiva; el justo está ocupado en el estudio y observancia de la ley, expresión de la voluntad de Dios.

          En neto contraste aparecen los malvados: paja, la parte inútil y más liviana del trigo. El Juicio puede ser escatológico (según texto masorético) o quizás un juicio cualquiera en esta vida (según la traducción de los LXX). En este mundo el juicio consistiría en la exclusión del pecador de la compañía y suerte del justo.
          El salmo primero no es himno ni acción de gracias, no es súplica ni acto de confianza. Es una reflexión tranquila, un enunciado seguro sobre el destino del hombre. Destino que se cumple en un sistema de oposiciones simples, porque la libertad divide a los hombres en campos éticos, y lo ético es parte del quehacer sapiencial.
          El tema y la teología del Salmo 1 serían como el planteo doctrinal de todo el salterio. La bienaventuranza está fundamentada en la Ley del Señor, en su obediencia y en la aceptación y el seguimiento de la voluntad de Dios, para adquirir la verdadera sabiduría que se expresa con un estilo de vida caracterizado por la confianza, la obediencia y el seguimiento, es la vida del justo. La bienaventuranza es consecuencia de la vivencia del proyecto y la voluntad de Dios. Lo contrario es la vida de los malvados que se caracteriza por el vacío y el sinsentido que terminan en la perdición. El salterio revela y manifiesta el camino de los justos, camino de felicidad y bienaventuranza, de sabiduría de vida, manifestación de la voluntad de Dios.

3.     ANÁLISIS PERSONAL

          La comparación del ser humano y el árbol frondoso en común en el Antiguo Testamento (véase Sal 92:12–15; Jer 11:19; 17:8; Ez 17:5–10, 22–24; 19:10), y también se repite en el Oriente Medio (p.ej., en la literatura egipcia y en Qumrán). Por lo común de las palmeras en la región, algunos estudiosos las identifican con el «árbol» del salmo (Sal 92:12). El uso de la palabra hebrea traducida como «plantado», puede ser una referencia a que el ser humano es feliz a la medida que se relaciona íntimamente con Dios, de la forma que el árbol se nutre junto a las fuentes de agua. Y la alusión a las aguas puede poner de manifiesto no solo los ríos y manantiales naturales sino los canales de irrigación que eran comunes en Egipto y Mesopotamia. De esa forma ordenada y efectiva el árbol recibía los nutrientes necesarios, independientemente de los caprichos del tiempo y sus inclemencias, para mantener sus hojas y brindar buenos frutos en la época precisa. Más que algún símbolo relacionado con la inmortalidad, la imagen afirma la importancia de vivir amparado en la Ley divina, que produce en las personas bienestar, seguridad, paz y prosperidad.[25]
          El justo y el impío son israelitas (pueblo de Dios). Esta aclaración es necesaria porque la idea común es que el impío es alguien pagano; pero eso no es lo que se evidencia en los salmos, según el contexto de la literatura sapiencial, sino que en casi el ciento por ciento, con raras excepciones, el impío es un israelita. Y mientras el justo vive (negativamente), aislándose del camino malo y, positivamente, sujetándose a la ley de Dios; el impío anda en camino de desobediencia y rebelión contra Dios, ajeno a las estipulaciones del pacto, por lo general en la holgura de su riqueza a expensas de su explotación de los pobres, huérfanos, viudas e indefensos en Israel. Jesús recuerda eso en el sermón del monte y a lo largo de su ministerio, cuando enfatiza que el reino de los cielos es para los sencillos, y cuando anuncia que “el Espíritu del Señor está sobre él por cuanto le ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres, le ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón…” (Lc 4:18), estos no son otros que los justos y bienaventurados del salmo uno.
          Los demás términos en importancia, en la primera sección, con relación al justo son tres: consejo-camino-silla; con tres verbos principales: caminar-parar-sentar. El símil que le corresponde es la figura del «hombre-árbol», que a su vez tiene tres características especiales: da fruto, su hoja no cae, prospera. Del mismo modo, la segunda parte viene acompañada del fuerte contraste del versículo cuatro con su respectivo símil y figura del «hombre-paja», que tiene las características contrarias al anterior, es decir, no da fruto, su hoja cae, no prospera; pero hay una más, doblemente reforzada por el paralelismo sinonímico del versículo cinco, a saber, no se levanta y cae hasta perecer.
          En esto consiste el desarrollo que seguirá el salmo uno, teniendo como punto de referencia la ley de Jehová, el éxito de obedecerla y el fracaso por dejarla. El escoger uno de los dos caminos tiene consecuencias que se ven al final. Jehová pesa las acciones de ambos y es el juez que decidirá su suerte. Los malos han seguido un camino; los justos otro. El destino que les corresponde es distinto. Los justos preservan su vida a posteridad, los impíos la pierden a perpetuidad.

1.       El mejor remedio para la contienda es evitarla. Cuando se interponen los intereses humanos, surgen las pugnas, afloran las avaricias y se crispan los ánimos.
2.       El peligro de dejarse encandilar por falsos paraísos. Sodoma y Gomorra pueden parecer Edenes. La abundancia material empobrece la abundancia espiritual.
3.       Dejar a Dios la elección. Dios se encarga de disipar los temores y se compromete a cubrir todas nuestras necesidades. Dios cuida de los suyos y evita que sean arrebatados por el viento.


          Este salmo es una buena forma de comparar el mensaje que Jesucristo nos da en (Mat.7:13-14), con imágenes instructivas sobre las dos sendas, y el oír y hacer cumplimiento la Palabra de Dios, esto es la garantía de la fuerza y estabilidad en Cristo que Él mismo es el camino de justicia, siendo que el que permanece en Él da frutos abundantes, podemos incluso ver la parábola de la vid, para eso están destinados los cristianos ,los justos para alimentarnos en Cristo, hundir nuestras raíces en la corriente de agua que es la Palabra de Dios y dar los frutos abundantes en la sociedad actual y en el transcurso de nuestras vidas.
          El evangelista Billy Sunday acostumbraba a contar la historia de un cristiano profesante que consiguió trabajo en un campo maderero, que tenía reputación de ser un lugar de impiedad. Un amigo, al oír que este hombre había conseguido un puesto de trabajo allí, le dijo: “Si estos taladores se enteraran de que eres cristiano, vas a pasarlo muy mal.” El hombre le respondió: “Ya lo sé, ¡pero es que realmente necesito el trabajo!” Al día siguiente salió hacia el campo.
Después de un año, decidió volver a la ciudad para hacer una visita. Estando en la ciudad, se encontró con el amigo que le había prevenido del ridículo y de la persecución con que se iba a encontrar de parte de los otros taladores. “¿Y cómo te ha ido?”, le preguntó el amigo. “¿Te causaron problemas por ser cristiano?” “Oh, no, no en absoluto”, confesó el hombre. “No me han molestado en absoluto; ¡todavía no se han enterado de que soy cristiano!”




SALMO 13
Plegaria pidiendo ayuda en el sufrimiento
             
1.     INTRODUCCIÓN
                 Me parece interesante resaltar un aspecto implícito en la poesía sapiencial donde también gracias a la oración comunitaria de los salmos, la conciencia cristiana ha recordado y comprendido que es imposible dirigirse al Padre que está en los cielos sin una auténtica comunión de vida con los hermanos y hermanas que están en la tierra.  No sólo eso; los cristianos, al insertarse vitalmente en la tradición orante de los judíos, aprendieron a orar cantando las “magnalia  Dei”, es decir, las maravillas realizadas por Dios tanto en la creación del mundo y de la humanidad, como en la historia de Israel y de la Iglesia. Sin embargo, esta forma de oración, tomada de la Escritura, no excluye ciertamente expresiones más libres, y estas no sólo continuarán caracterizando la oración personal, sino también enriqueciendo la misma oración litúrgica, por ejemplo con himnos y tropos. En cualquier caso, el libro del Salterio ha de ser la fuente ideal de la oración cristiana, y en él  seguirá inspirándose la Iglesia en el nuevo milenio.[26]
                 ¿Estamos enfrentando problemas, dificultades serias en su vida, y eso trae a su vida desaliento, tristeza? Seguramente que todos nos hemos sentido así en alguna ocasión. ¿Alguna vez hemos enfrentado alguna situación difícil, que dura más de lo que quisiéramos? ¿Alguna vez nos hemos desalentado, porque en nuestra lógica, sentimos que Dios tarda demasiado en venir en su Socorro? Y no solo eso, sino que además, cuando además de esas circunstancias difíciles, pareciera que Dios no aparece, que Dios tarda más de lo debido, Entonces surge la duda y la consecuencia de esa situación es el desaliento, la tristeza.
                 La Real Academia de la Lengua Española, define el Desaliento como: “decaimiento del ánimo, desfallecimiento de las fuerzas”.
                 La consecuencia del desaliento y la tristeza es que surge la duda, y debemos entender que la duda daña nuestro corazón, porque mina nuestra confianza en dios. Éste salmo es un bálsamo de aceite que nos regenera en nuestra búsqueda continua.

2.     ANALISIS GRAMATICAL
131 לַמְנַצֵּחַ מִזְמוֹר לְדָוִד׃
2 עַד־אָנָה יְהוָה תִּשְׁכָּחֵנִי נֶצַח עַד־אָנָה תַּסְתִּיר אֶת־פָּנֶיךָ מִמֶּנִּי׃
3 עַד־אָנָה אָשִׁית עֵצוֹת בְּנַפְשִׁי יָגוֹן בִּלְבָבִי יוֹמָם עַד־אָנָה יָרוּם אֹיְבִי עָלָי׃
4 הַבִּיטָה עֲנֵנִי יְהוָה אֱלֹהָי הָאִירָה עֵינַי פֶּן־אִישַׁן הַמָּוֶת׃
5 פֶּן־יֹאמַר אֹיְבִי יְכָלְתִּיו צָרַי יָגִילוּ כִּי אֶמּוֹט׃
6 וַאֲנִי בְּחַסְדְּךָ בָטַחְתִּי יָגֵל לִבִּי בִּישׁוּעָתֶךָ אָשִׁירָה לַיהוָה כִּי גָמַל עָלָי׃

1 ¿HASTA cuándo, Jehová? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí? 2 ¿Hasta cuándo pondré consejos en mi alma, Con ansiedad en mi corazón cada día? ¿Hasta cuándo será enaltecido mi enemigo sobre mí? 3 Mira, óyeme, Jehová Dios mío: Alumbra mis ojos, porque no duerma en muerte; 4 Porque no diga mi enemigo, Vencido: Mis enemigos se alegrarán, si yo resbalare. 5 Mas yo en tu misericordia he confiado: Alegraráse mi corazón en tu salud. 6 Cantaré a Jehová, Porque me ha hecho bien. [27]
2.1           PARÁFRASIS LITERAL
(1)   ¿Hasta dónde (conjunción adverbial) estarás siempre ausente de mi (imperfecto sufijado) Jehová? ¿Hasta dónde esconderás (imperfecto) tú cara desde mí?
(2)   ¿Hasta dónde beberé (imperfecto qal sufijado) consejos en mi alma, tristezas encerradas en mi corazón días (todos)? ¿Hasta dónde me engañará (qal imperfecto) mi enemigo?
(3)   Haz que se examine (imperativo hifil insistente) mírame (qal imperativo) a mí, Jehová, oh mi Dios. Haz que san alumbrados (hifil imperativo) mis ojos, para que no (conjunción negativo) dormiré (qal imperfecto) en la muerte (con artículo)
(4)   Que no dirá (imperfecto) mi enemigo, lo pude (perfecto qal) porque mi enemigo se alegrará (imperfecto) si yo fuera (en el futuro) (imperfecto pasivo Nifal) resbalado
(5)   Y yo en tu misericordia me he apresurado (perfecto) mi corazón se alegrará (yusivo) en la cuerda que existe de tu salvación Jehová.
(6)   Y yo cantaré a Jehová, porque me ha hecho bien (yusivos cohortativo)

2.2            ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA

El grito de desesperación
13:1–6
I.    El anhelo (vv. 1, 2).
1.   No me olvides.
2.   No escondas tu rostro.
3.   Enaltece mi alma.
II.  El deseo (vv. 3, 4).
1.   Respóndeme.
2.   Alumbra mis ojos.
3.   Mis enemigos no se alegren.
III. La liberación, (vv. 5, 6).
1.   Confianza en la misericordia.
2.   Alegría en la salvación.
3.   Alabanza en la liberación.

                 La lectura atenta de este salmo me ha llevado a descubrir que sus temas centrales giran en torno a una serie de estructuras tripartitas. El número tres es clave en este salmo: Tres son las partes que componen el bosquejo del salmo:
1        El lamento propiamente hablando (vv. 1-2).
2        La petición y el motivo (vv. 3-4).
3        La confesión de confianza y el voto de alabanza (vv. 5-6).
                 La primera parte (vv. 1-2) está formada por una serie de preguntas retóricas que describen la triple situación de desorientación que vive el suplicante. Los primeros dos ¿hasta cuándo? (v. 1) se centran en Dios, a quien el salmista tiene por interlocutor; es decir, un «TÚ». El siguiente ¿hasta cuándo? (v. 2a) apela al «YO» del salmista y refleja el profundo estado de depresión del suplicante. El último ¿hasta cuándo? (v. 2b) se refiere a un «ÉL», el enemigo que humilla al suplicante. Así, en una serie de tres se abarcan todos los círculos de experiencia existencial del ser humano: lo religioso o espiritual, lo psicológico y lo social.
                 En la segunda parte (vv. 3-4) aparecen dos series de tres. La primera, marca la petición y está formada por tres imperativos: mira, respóndeme y alumbra. Todos estos imperativos están dirigidos a Dios, mostrándose así que el salmista está plenamente consciente de que SOLO el Señor puede resolver su situación de abandono, angustia y humillación. Hay tres motivaciones dirigidas a Dios: ¿Por qué Dios tiene que socorrer al suplicante? ¡Que no caiga yo en el sueño de la muerte! ¡Que no diga mi enemigo: «Lo he vencido»! ¡Que no se alegre si yo fracaso!
                 La tercera parte (vv. 5-6) está formada por dos series de tres que afirman la confianza del salmista y su anhelo de alabar al Señor. Hay tres referencias de Dios y sus acciones: El amor o la solidaridad divina, la salvación divina, y el nombre de Dios, Yahvé. Hay tres anuncios de parte del salmista: Yo confío en tu amor, me alegro por tu salvación, cantaré a Yahvé por el bien que me ha hecho.
                 Así que, el ritmo de tres marca el movimiento del salmo y nos lleva de manera ascendente del lamento a la confianza a la adoración. En su totalidad, el salmo declara que aquel que eleva su lamento a Dios no permanece sumido para siempre en él, pues a pesar de sufrir el dolor, afirma su confianza en Dios y termina elevando voces de alegre alabanza.
                 Con respecto a la estructura de este salmo, y de otros salmos de lamento, es necesario considerar el papel que juega la conjunción adversativa we («pero») del versículo 5.
                 Esta conjunción, unida al enfático «yo», indica un nuevo comienzo: el cambio de lamento a confianza. El ki («porque») del versículo 6 remata el cambio en el espíritu del salmo, afirmando la razón de la confianza del salmista en Yahvé: Dios me ha «pagado» bien.
                 Es importante señalar aquí la importancia de tener a Yahvé como el interlocutor del lamento. El simple hecho de dirigir el lamento al Señor hace que la situación del sufriente cambie, pues el lamento no se desvanece en el infinito, sino que halla en Dios un oído atento.
                 El tema del «olvido de Dios» es muy común en los textos de lamento: 1 Samuel 1.11; Salmos 10.11-12; 42.9; 44.24; 74.19, 23; 77.9; Isaías 49.14; Lamentaciones 5.20 (cf. Sal 9.12; Is 49.15). El olvido, la lejanía divina y la expresión «para siempre» marcan no solo la profundidad del dolor humano, sino también la impaciencia y cansancio del salmista por su situación. Lo que más abate al salmista es la experiencia de abandono divino (Sal 22.1).[28]
                 De acuerdo a este salmo, los lamentos no presentan situaciones concretas o específicas; marcan, más bien, el contexto total de la existencia humana. De esta manera, todo individuo que sufre, sea cual fuere su situación, encuentra en este salmo el eco de su pesar y puede apropiarse de él como su oración de súplica y confianza a Dios.[29]
3       ANALISIS PERSONAL
              La misericordia de Dios es la manifestación concreta y real de su amor extraordinario y entrañable, la revelación de su compromiso salvador con el pueblo del pacto y la alianza, y la actualización de su dedicación a la gente en necesidad.
                 Podemos ver la trayectoria de la fe del salmista: pasa por la prueba, la angustia y la duda, pero sigue confiando y ahora está seguro de que Dios le contestará. Su fe tiene buena base, no en sí misma sino en la misericordia de Dios. Se basa en lo que Dios es, en sus promesas, y en que el mismo salmista ha experimentado este amor de Dios. Ya que brota de nuevo esta confianza, se alegra su corazón; la verdadera alegría es tener la salvación de Dios y su obra en la vida. La respuesta: Cantaré a Jehovah. Nótese, es a Jehovah; la adoración se dirige a él porque la merece.
                 A pesar de la debilidad de la carne, el salmista busca ayuda en Dios. ¡Mira; respóndeme…! Jesús dijo: Pedid, y se os dará (Mat. 7:7). El Espíritu Santo pone en nuestra mente los modelos de oración de las Escrituras. Es una de las razones por la que los salmos siguen siendo tan usados por los que aman a Dios.




SALMO 23
Jehová es mi pastor
                
1.      INTRODUCCIÓN
                 El Salmo 23 ha sido reconocido desde el principio como una de las joyas del Salterio y, en efecto, de toda la literatura religiosa. Pertenece a la época de madurez de David, pero está basado en las experiencias de su juventud, y describe escenas que él habría visto cuando, como joven pastor, andaba en las praderas y en las sierras de Judá.
Dos figuras se combinan en este salmo, ambas comunes en la vida campesina; la primera, la del pastor que cuida las ovejas (vs. 1–4), la segunda, la del banquete. Seguramente durante su juventud a menudo participó David en banquetes efectuados bajo los árboles juntamente con sus hermanos y los simples paisanos de su aldea.[30]
                 Este Salmo es considerado un Salmo mesiánico junto con los Salmos 22 y 24. Los tres salmos hablan de Cristo. El Salmo describe tres etapas. Primero, cómo Jesús fue protegido y guiado por Dios. Segundo, como Jesús enfrenta el sufrimiento en la cruz. Y finalmente como Jesús ve la victoria.
                 El siempre recordado L. Alonso Schökel[31], gran impulsor del estudio del Salterio en el ámbito hispano, indica que los Salmos de confianza son aquellos en los que “el orante expresa un estado de ánimo reposado o dramático, gozoso o tembloroso, sin enunciar peticiones específicas”. En ellos, el que se dirige a Dios se entrega y abandona enteramente a éste, su salvador, en cuyas manos pone toda su existencia. A dicho grupo pertenece también el Salmo 23, uno de los favoritos del Salterio, tan lleno de consuelo4, tal como indica uno de sus versículos (tú estás conmigo), que titula precisamente nuestras páginas.



2.     ANALISIS GRAMATICAL[32]
231 מִזְמוֹר לְדָוִד יְהוָה רֹעִי לֹא אֶחְסָר׃
2 בִּנְאוֹת דֶּשֶׁא יַרְבִּיצֵנִי עַל־מֵי מְנֻחוֹת יְנַהֲלֵנִי׃
3 נַפְשִׁי יְשׁוֹבֵב יַנְחֵנִי בְמַעְגְּלֵי־צֶדֶק לְמַעַן שְׁמוֹ׃
4 גַּם כִּי־אֵלֵךְ בְּגֵיא צַלְמָוֶת לֹא־אִירָא רָע כִּי־אַתָּה עִמָּדִי שִׁבְטְךָ וּמִשְׁעַנְתֶּךָ הֵמָּה יְנַחֲמֻנִי׃
5 תַּעֲרֹךְ לְפָנַי שֻׁלְחָן נֶגֶד צֹרְרָי דִּשַּׁנְתָּ בַשֶּׁמֶן רֹאשִׁי כּוֹסִי רְוָיָה׃
6 אַךְ טוֹב וָחֶסֶד יִרְדְּפוּנִי כָּל־יְמֵי חַיָּי וְשַׁבְתִּי בְּבֵית־יְהוָה לְאֹרֶךְ יָמִים׃

                 Jehová es mi pastor; nada me faltará. 2 En lugares de delicados pastos me hará yacer: Junto a aguas de reposo me pastoreará. 3 Confortará mi alma; Guiárame por sendas de justicia por amor de su nombre. 4 Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno; porque tú estarás conmigo: Tu vara y tu cayado me infundirán aliento. 5 Aderezarás mesa delante de mí, en presencia de mis angustiadores: Ungiste mi cabeza con aceite: mi copa está rebosando. 6 Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida: Y en la casa de Jehová moraré por largos días.[33]
                
2.1   PARÁFRASIS LITERAL
(1)   Poema a/para David, Jehová es el que me apacienta a mi (participio sufijado qal) no (nada) me faltó (pretérito) de nada carecí.
(2)   En casas de pastos me ha hecho (hifil pretérito) reclinarme hacia aguas (constructo) de descanso me condujo (piel pretérito)
(3)   Mi alma llevó (piel pretérito) me hizo transportar (hifil pretérito) en lazos juntos de justicia por causa de su nombre
(4)   Porque aunque caminaré (qal imperfecto prefijado) en un valle mortal no me asustaré (qal imperfecto) de nada malo porque tú conmigo (estás); Tu vara y tu bastón (sustento) me consolaron (qal perfecto)
(5)   Arreglaste (qal pretérito perfecto) en la cara de mi mesa extendida, en presencia de mis estorbadores. Satisficiste (piel pretérito) con aceite mi cabeza, mi cáliz (es) satisfecho
(6)   Sólo lo bueno y la misericordia correrán detrás (qal imperfecto) cada uno de mis días. Me asenté (qal perfecto sufijado) en casa de Jehová para/por largos días

2.2   ELEMENTOS QUE DESTACAN Y ESTRUCTURA

Cualidades del pastor
23:1–6
1.   El pastor bueno: vida y protección.
Nada me faltará, v 1.
El buen pastor pone su vida, Juan 10:11.
2.   El pastor bondadoso: descanso y reposo.
Me hace descansar, v. 2.
      Y las ovejas le siguen, porque conocen su voz, Juan 10:4.
3.   El pastor sabio: guía y enseñanza.
      Y me guiará por sendas de justicia, v. 3.
      Y conozco mis ovejas, Juan 10:14.
4.   El pastor poderoso: compañía y victoria.
      Porque tú estarás conmigo, v. 4.
      Y nadie las arrebatará de mi mano, Juan 10:28.
5.   El pastor cuidadoso: provisión y alimento.
      Preparas mesa delante de mí, v. 5.
      Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia, Juan 10:10.
6.   El pastor personal: amistad y consuelo.
      Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, v. 6.
      A sus ovejas llama por su nombre, Juan 10:3.
7.   El pastor principal: hogar y familia.
      Y en la casa de Jehovah moraré por días sin fin, v. 6.
      Yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, Juan 10:28.
                 Hay un paralelismo sinonímico. La metáfora de Dios como pastor es de importancia capital para la comprensión adecuada del poema. Este artificio literario se ha convertido en una de las imágenes más utilizadas para representar la naturaleza divina. De particular virtud teológica e interpretativa es que esta figura literaria evoca, insinúa, propone y describe, pero no limita las posibilidades de su interpretación ni elimina las alternativas de su aplicación. La imagen del Dios-pastor es polisémica, y su significado varía, crece, cambia y se desarrolla con las capacidades y la imaginación de los lectores del poema. La figura del Dios-pastor, además, marca el paso de todo el poema y revela la gran capacidad de comunicación teológica del autor.
                 En las culturas del Oriente Medio antiguo, en las cuales la sociología pastoril era de vital importancia, la imagen del pastor de ovejas era muy popular. La responsabilidad primordial del pastor era el bienestar y la seguridad de las ovejas. Su trabajo era cuidar y alimentar al rebaño, y protegerlo de los peligros asociados a los animales feroces, las inclemencias del tiempo y las dificultades del camino.

                 Una peculiaridad semántica de la palabra «pastor» era que también se utilizaba para identificar y designar no solo a las divinidades sino a líderes nacionales, particularmente a reyes, que debían cumplir responsabilidades de protección a sus comunidades. Los dioses antiguos y los reyes eran pastores de sus pueblos, y se visualizaban con «vara y callado»—p.ej., con mazo y bastón—. Buenos ejemplos de la designación rey-pastor y dios-pastor es que al famoso monarca Hammurabi se le llama «el pastor» o «el pastor del pueblo», y al dios Shamash se le conoce como «el pastor de los pueblos del mundo»[34]
                 El uso metafórico de la palabra «pastor» también se manifestó en Israel, y con cierta regularidad se indica que el Señor es pastor de su pueblo (véase Gen 49:24; Sal 28:9; 74:1; 95:7; 100:3; Jer 31:10; Mic 7:14;), y que los reyes, que eran a última instancia lugartenientes de Dios, también eran vistos como pastores de la comunidad (Sal 78:70–72; Jer 23:1–4; 49:20; Mic 5:4). La imagen se relaciona íntimamente con el peregrinar del pueblo de Israel por el desierto al salir de Egipto (Sal 77:20; 78:52–53; 80:1), y también con la experiencia de regreso del exilio en Babilonia (Is 40:11; 49:9–10). En efecto, el uso de la imagen del Dios-pastor, que tenía una larga tradición política, religiosa y social, evocaba en la comunidad antigua de Israel no solo las ideas tradicionales de los pastores de ovejas del campo, sino aludía a la importancia de los líderes políticos del pueblo y las virtudes de las intervenciones divinas en la historia nacional.

                 El salmo ha sido catalogado como uno de acción de gracias, y si se relaciona directamente con David, puede ser visto como un salmo real. Sin embargo, la lectura cuidadosa del poema revela que es un salmo de confianza en el Señor. Posiblemente era utilizado en el Templo durante algunas celebraciones de acción de gracias. Pudo haber sido usado como un salmo individual o, si se interpreta al individuo como representante del pueblo, como una expresión de gratitud y confianza de la comunidad. Lo general de las imágenes y la falta de detalles históricos hace muy difícil la identificación precisa de la fecha de composición del poema, aunque posiblemente es de origen post-exílico.
                 La estructura literaria del salmo es la siguiente:
•                El Dios-pastor: vv. 1–4
•                El Dios anfitrión del banquete: vv. 5–6
                 La idea del Dios-pastor alude a la liberación de Egipto, a la protección por el desierto del Sinaí y a la llegada a la Tierra Prometida. Dios fue pastor del pueblo durante ese período tan fundamental de la historia nacional, y el salmista lo reconoce y los presenta como su pastor personal, quien no solo cuida al pueblo como comunidad política, religiosa y social, sino que le atiende como persona, con sus necesidades particulares.
                 El verbo hebreo, traducido en Reina-Valera en futuro como «faltará», debe ser vertido en castellano en tiempo presente. La frase debe indicar: «nada me falta», pues todo el salmo es una afirmación de la presencia divina que supera los límites del tiempo. Dios no está cautivo en el pasado ni en el futuro, vive en un eterno presente, desde el cual evalúa la historia pasada, analiza la vida actual y se proyecta al porvenir. La idea del poeta es la siguiente: «Mientras el Señor sea mi pastor, no tendré carencias, nada me falta, en el presente continuo que me lleva del ayer hasta el mañana». Esta idea evoca una vez más la experiencia del desierto, en la cual Dios le suplió al pueblo para que no pereciera (Dt 2:7; Sal 34:10).
                 Las imágenes de descanso y reposo (v. 2) contribuyen destacadamente a la idea de seguridad que transmite el poema. La frase «confortará mi alma» quiere decir que renueva la vitalidad del salmista, que restablece sus fuerzas, que le ayuda a enfrentar la vida con seguridad (Sal 19:7; Lam 1:11, 16, 19). Esa restauración divina le permite seguir los caminos de la justicia fundamentado en el nombre de Dios, que implica seguir una conducta recta, y vivir con nobleza y dignidad. «Por amor a su nombre», es decir, por motivo de lo que Dios es, haciendo honor a su naturaleza santa y justa. La fortaleza del Señor le permite vivir de acuerdo con los principios y los valores que se desprenden de la justicia. Y su seguridad y confianza se apoyan en la reputación divina, pues el nombre de Dios se asocia a su auto-revelación a través de la historia (Sal 25:11; 31:2; 106:8; Is 43:25; 48:9).
                 La frase «valle de sombra de muerte» o «valle extremadamente profundo y oscuro» es una forma hebrea superlativa que transmite la idea de oscuridad total e intensa. La expresión es una manera de destacar la dificultad, subrayar la crisis y enfatizar la adversidad, en contraposición a los «delicados pastos» y las «aguas de reposo» que simbolizan la calma y la sobriedad (v. 2). Aunque está en medio de la crisis, el salmista declara su seguridad y no le teme al mal, porque confía que el Señor le acompaña (Gen 26:3, 24; 28:15; 31:3; Dt 31:6; Jos 1:5, 9). Le infunden aliento la vara y el callado de Dios, que son símbolos inequívocos de autoridad y poder. La vara era como un mazo para defenderse de los enemigos y los animales salvajes (2 S 23:21; Mic 7:14); y el callado, un bastón largo que se usaba como apoyo y sostén.
vv. 5–6: La imagen de Dios en el poema cambia de pastor a anfitrión. La cultura nómada y pastoril se mantiene, aunque la idea es presentar a Dios como quien auspicia un gran banquete. La invitación a comer en estas culturas antiguas es mucho más que un acto físico para satisfacer el hambre, es un gesto serio de hospitalidad, una demostración elocuente de solidaridad y alianza. En esas comunidades, las alianzas y los pactos se celebraban con grandes banquetes (Gen 18:5–8; 19:2–3; Sal 41:9; Lc 22:17–21), y la falta de solidaridad hacia alguna persona es decir, no invitarlo a la cena o al banquete, no incorporarlo al grupo celebrante—, equivalía a quedarse solo en el desierto inhóspito, cuyo fin podía ser de muerte.
                 El salmista es invitado al banquete en «presencia de sus angustiadores», que es una manera de reconocer su dignidad y afirmar su prestigio. «Los angustiadores» eran los enemigos del salmista, las personas que le causaban dificultad. El Dios-pastor y anfitrión no solo invita al poeta a la cena sino que le manifiesta públicamente su amistad y afirma que han establecido un pacto. Ese reconocimiento se pone de manifiesto en la unción de la cabeza con aceite, que era otra demostración importante de hospitalidad y solidaridad (Lc 7:37–38, 46). La copa rebosante es una magnífica alusión al anfitrión generoso, dadivoso y grato. Estas imágenes del banquete pueden relacionarse con los rituales de acción de gracias que se llevaban a efecto en el Templo (Sal 22:22–26; 116:13).
El reconocimiento de Dios como pastor y anfitrión hace que el salmista disfrute del bien y la misericordia. Se pone claramente de manifiesto en el poema la transformación de las circunstancias del salmista. De la crisis mortal que produce el «valle de la sombra de muerte», ahora disfruta las bondades y la misericordia de Dios. ¡Ya no se preocupa por sus angustiadores! ¡Solo disfruta la hospitalidad y generosidad del anfitrión!
                 La frase final del salmo cierra con broche de oro el poema, pues «morar en la casa del Señor» es fuente de esperanza y seguridad. Y esa convicción no solo le permite agradecer y disfrutar las bendiciones divinas en el presente sino que le impele a anticipar el futuro lleno de esplendor y promesa. La expresión «todos los días de su vida» se refiere a la existencia natural del poeta; y los «largos días» infieren el futuro indeterminado, el porvenir indescriptible, el mañana que se acerca. Culmina el poema con una declaración de fe y seguridad: El futuro del salmista está relacionado con Dios, representado en la casa del Señor.
                 La importancia que la iglesia le ha dado a este salmo nunca puede sub-estimarse. En primer lugar se identifica una muy importante dimensión personal e individual del Dios-pastor. En la parábola de Jesús, que la cual el pastor deja a las noventa y nueve por buscar a la perdida (Lc 15:4), se pone de relieve esa particular dimensión íntima, personal e individual del poema. Además, las primeras comunidades cristianas identificaron a Jesús con el buen pastor (Jn 10:11), y también lo reconocían como guardián de sus almas (1 P 2:25; 5:4). El salmo ha sido particularmente usado en cultos funerales, pues pone en evidencia la seguridad de los creyentes que sobrepasa los niveles del tiempo.
                 Respecto a este salmo una palabra adicional es importante. El salmista presenta a Dios como pastor, en una cultura donde el pastor no tenía mucho prestigio social ni ocupaba posiciones destacadas en la escala económica y política de su tiempo. Para el poeta, el Dios bíblico se hizo pastor, que es una manera figurada de revelar la capacidad divina de hacerse frágil, de humillarse a sí mismo, de tomar forma de servidor, de hacerse semejante a las personas, de hacerse vulnerable. Con esa imagen, el poeta bíblico le brinda a la iglesia una lección de humildad: Un Dios cuya gloria no pueden contener los cielos de los cielos, se hizo pastor para enseñarnos el camino del servicio y la humildad.
                

3.     ANALISIS PERSONAL
                 Este poema debe mucho de su encanto a la habilidosa combinación de imágenes contrastantes que cubren los mayores aspectos de la vida, o sea la vida al aire libre (vv. 1–2) y bajo techo (v. 6b); la paz (v. 2) y el peligro (v. 4b); la posibilidad del mal (v. 4b) y la perspectiva del bien (v. 5); épocas de refuerzo para el alma (v. 3a) y épocas de ominosas (mal agüero) tinieblas (v. 4a); la experiencia de seguir adelante (vv. 1–2) y una vida de estable seguridad (v. 6b). Sin embargo, todas las facetas literarias de esta joya lírica están enfocadas en el Señor cuyo cuidado tierno, su vigilancia incesante y su presencia perpetua imparten a la vida todo su color y satisfacción.[35]
                 Una de las imágenes que más me han impactado emocionalmente es “Junto a aguas de reposo”. Cito a un gran predicador que las define: ¿Cuáles son estas aguas de reposo sino las influencias y gracias de un bendito Espíritu? Su Espíritu nos ayuda en varias actividades, como aguas en plural para limpiarnos, refrescarnos, fertilizar, querer.”[36]
                 Las reflexiones anteriores nos abren numerosas pistas para orar el salmo en cristiano. Todas nos hablan de serenidad, paz, abandono en las manos de Dios. Alguna más puede ayudarnos a gustar la belleza y profundidad del salmo
                 Podemos orarlo también a la luz de los textos a los que acompaña como salmo responsorial: Dan 13, 1ss; Is 25, 6-10; Heb 13, 20-21..., textos que nos remiten a la declaración formal y solemne de Jesús: "Yo soy el buen pastor; conozco a las mías y las mías me conocen a mí" (Jn 10,1-16).
                 Hombres concretos que rezaron este salmo en circunstancias bien concretas. Por ejemplo, Francisco de Asís, según nos cuenta S. Buenaventura, lo va desgranando confiadamente mientras camina al campamento del Sultán. En la novela "El día más largo" Sin duda, un salmo para toda la vida. Jesús seguramente lo recitó en muchas ocasiones.




CONCLUSIONES FINALES

                 El presente trabajo ha pretendido ofrecer un marco teórico bíblico para sustentar el quehacer de la sapiencial cristiana. Los principios bíblicos que subyacen como fundamento de la lectura devocional, para luego ver como se ejecutan en la práctica. Es mi intención el que el lector pueda aplicar en su ministerio los principios y sugerencias que se han sugerido en las páginas de este esbozo.
                 Sigamos haciendo la labor que Dios nos ha encomendado a todos los que formamos parte del Cuerpo de Cristo, hagamos discípulos, y enseñémosles por todos los medios, incluyendo la consejería sustentada en las Sagradas Escrituras; por supuesto para la extensión del Reino y para la Gloria de Dios. Con los poemas cantados en todas las épocas, viviremos más seguros y confiados en su autoría divina.
                




                







B I B L I O G R A F Í A



Carro, DANIEL; Poe, José TomáS; Zorzoli, Rubén Comentario bíblico mundo hispano: Salmos. 1. ed. ed. El Paso, TX : Editorial Mundo Hispano, 1993

Gillis, Carroll: El Antiguo Testamento: Un Comentario Sobre Su Historia y Literatura, Tomos I-V. El Paso, TX: Casa Bautista De Publicaciones, 1991

Graham, NC: El himnario bautista de la gracia Publicaciones Faro de Gracia, 2000

Hayford, Jack W.: Un estudio de Salmos: Cuando se canta de corazón, Serie Vide en Plenitud Guías para explorar la Biblia. ed. Nashville: Editorial Caribe, 1996


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Lockward, Alfonso: Nuevo diccionario de la Biblia.


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Pagán, Samuel: De Lo Profundo, Señor, a Ti Clamo: Introducción y comentario. Miami, FL: Editorial Patmos, 2007


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Williams, Gary: Estudios Bíblicos ELA: Alabanza y clamor a Dios (Salmos). Puebla, Pue., México: Ediciones Las Américas, A. C., 1995






[1] DOUGLAS, J.D.: Nuevo diccionario Bı́blico: Primera Edicion.
[2] Apuntes recogidos en las clases del Dr. VARGAS Esly. Sapienciales CURSO 2013. Primer semestre.
[3] Williams, Gary: Estudios Bı́blicos ELA: Alabanza y clamor a Dios (Salmos). Puebla, Pue., México : Ediciones Las Américas, A. C., 1995
[4] CUERNOS ANTIGUOS. «Alabadle a son de bocina», dice el Salmo 150.3. La música y el canto eran vitales en la vida hebrea al principio. Los salmos en sí mismos eran cantos, frecuentemente cantados con acompañamiento de instrumentos de viento o de cuerdas. Cuernos y bocinas, o trompetas, convocaban a la congregación, anunciaban festivales, daban la señal de ataque, o proclamaban la ascensión del rey.
[5] SALMOS DE ACCIONES DE GRACIAS. Esta es una página de los Salmos de acciones de gracias de los Rollos del Mar Muerto. Muy similares a los salmos del Antiguo Testamento, estas poesías líricas religiosas del período intertestamentario están escritas en primera persona, y expresan lamento por el pecado, conciencia de la debilidad y una convicción de la bondad y misericordia de Dios.
[6] Se suele decir que los salmos atribuidos a David fueron escritos mucho después porque sus inscripciones sugieren que hubo ligas de músicos (por ejemplo, los hijos de Coré). Esa organización lleva a muchos a pensar que estos himnos deben datar de la época de los macabeos, siglo II a.C. Luego de excavar Ras Shamra y saber que hubo esas ligas en Siria y Palestina durante los tiempos de David, ahora resulta insensato atribuir eso salmos al período macabeo.
GEISLER, NORMAN ; BROOKS, RON: Apologética: Herramientas valiosas para la defensa de la fe. Miami, FL : Editorial Unilit, 1997
[7] The Lexham Hebrew Bible. Bellingham, WA : Lexham Press, 2012
[8] La Santa Biblia: Version Reina-Valera 1909 : Societies Biblical Unidas, 1909
[9] Éste intento es meramente personal, en base a una aproximación del alumno, sin consulta alguna para cerciorarse o no de su veracidad. Obedece a una paráfrasis no exenta de errores.
[10] Selah Palabra aislada que aparece 71 veces en los Salmos y tres veces en Habacuc (3:3, 9, 13; “el salterio menor”). Ya que todas las veces, salvo en Sal. 41 y 81, se refiere al tipo de melodía o salmodia en el título, en general se piensa que Selah debe ser una señal musical litúrgica, aunque su significado preciso no se conoce. Las siguientes son las sugestiones principales:
1. Término en *música o dirección musical para los cantores y/o la orquesta a fin de “elevar, e. d. cantar o tocar forte o crescendo. Así la LXX tiene diapsalma en cada caso, quizá como interludio musical más que doxológico.
2. Señal litúrgica (sālal, ‘elevar’, cf. ac. sollo, ‘oración’), tal vez para elevar la voz o las manos en oración. Puede haber comenzado a usarse, posiblemente en el período exílico, en relación con salmos usados en el culto público para denotar aquellos lugares en los que el sacerdote debía pronunciar una bendición. Algunos han considerado que significa “elevar” los ojos, con el fin de repetir el versículo, en cuyo caso sería equivalente a “da capo”. Otros derivan el vocablo de una raíz arm. sl, ‘inclinarse’, y por ello lo interpretan como indicación a los adoradores a que se prosternen en el lugar indicado.
3. El tárgum de Aquila y la Vg. traducen Selah mediante frases que equivalen a una exclamación, “para siempre”, y consideran que se trata de una expresión cúltica como “Amén y “Aleluya” (Sal. 46:3) al final de la liturgia o en lugares específicos dentro de ella (Sal. 3:2, 4, etc.).

[11] En relación a las clases obtenidas durante el curso, planteamos lo que percibimos a primera vista, sin una exégesis cuidadosa, en las relecturas y en consonancia con las notas adquiridas en el aula.
[12] A. W. Tozer
[13] Carro, Daniel ; Poe, José Tomás ; Zorzoli, Rubén O. ; Editorial Mundo Hispano (El Paso, Tex.): Comentario bı́blico mundo hispano: Salmos. 1. ed. ed. El Paso, TX : Editorial Mundo Hispano, 1993–
[14] Parenético: de exhortación y aliento
[15] Frase conocida de Teresa de Calcuta.
[16] Carro, Daniel ; Poe, José Tomás ; Zorzoli, Rubén O. ; Editorial Mundo Hispano (El Paso, Tex.): Comentario bı́blico mundo hispano: Salmos. 1. ed. ed. El Paso, TX : Editorial Mundo Hispano, 1993
[17] Biblia Hebraica Stuttgartensia. Stuttgart : German Bible Society; Westminster

[18] La Santa Biblia: Versión Reina-Valera 1909 : Sociedades Bíblicas Unidas, 1909
[19] Maria I de Escocia, llamada María Estuardo, (Palacio de Linlithgow (Escocia); 8 de diciembre de 1542 – Castillo de Fotheringhay, Northamptonshire (Inglaterra); 8 de febrero de 1587), reina de Escocia desde el 14 de diciembre de 1542 hasta 24 de julio de 1567. También denominada popularmente como María, reina de los escoceses, quizás sea la más conocida de los monarcas escoceses por su tempestuosa vida y trágica muerte.
[20] AGUSTÍN Confesiones, Capi XXI. Pág. 75
[21] Carro, Daniel ; Poe, José Tomás ; Zorzoli, Rubén O. ; Editorial Mundo Hispano (El Paso, Tex.): Comentario bı́blico mundo hispano: Salmos. 1. ed. ed. El Paso, TX : Editorial Mundo Hispano, 1993–
[22] Goethe
[23] Biblia Hebraica Stuttgartensia. Stuttgart : German Bible Society; Westminster Seminary,
[24] La Santa Biblia: Versión Reina-Valera 1909 : Sociedades Bíblicas Unidas, 1909
[25] PAGÁN, SAMUEL: De Lo Profundo, Señor, a Ti Clamo: Introducción y comentario. Miami, FL : Editorial Patmos, 2007
[26] Juan Pablo II, Catequesis del miércoles 28 de marzo de 2001   
[27] La Santa Biblia: Versión Reina-Valera 1909 : Sociedades Bíblicas Unidas, 1909
[28] Gillis, Carroll: El Antiguo Testamento: Un Comentario Sobre Su Historia y Literatura, Tomos I-V. El Paso, TX : Casa Bautista De Publicaciones, 1991
[29] HOFF, PABLO: Libros poéticos: Poesía y sabiduría de Israel. Miami, FL : Editorial Vida, 1998
[30] Gillis, Carroll: El Antiguo Testamento: Un Comentario Sobre Su Historia y Literatura, Tomos I-V. vol. 5. El Paso, TX : Casa Bautista De Publicaciones, 1991
[31] Hebraísta que junto a H.GUNKEL, dedican especial atención en algunas de sus obras a los sapienciales
[32] Biblia Hebraica Stuttgartensia. Stuttgart : German Bible Society; Westminster Seminary,1990
[33] La Santa Biblia: Versión Reina-Valera 1909 : Sociedades Bíblicas Unidas, 1909
[34] PAGÁN, SAMUEL: De Lo Profundo, Señor, a Ti Clamo: Introducción y comentario. Miami, FL : Editorial Patmos, 2007
[35] Hoff, Pablo: Libros poéticos: Poesía y sabiduría de Israel. Miami, FL : Editorial Vida, 1998 M’Caw y Motyer
[36] C. H. Spurgeon

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